Leopoldo García Aguilar es el menor de 10 hijos de la Maestra Guillermina Aguilar Alcántara y forma parte de la tercera generación de artistas del barro policromado en Ocotlán de Morelos, Oaxaca, México. Desde muy joven, comenzó a trabajar con barro, siguiendo las enseñanzas que le transmitió su madre. La obra de este artista se inspira principalmente en las raíces y la cultura de Ocotlán y del hermoso estado de Oaxaca. Otra inspiración importante es la muerte, ya que Leopoldo cree que es tanto el principio como el fin de la vida, la cual transforma en belleza y elegancia que hablan por sí solas. Leopoldo siempre ha sido perfeccionista con su trabajo y disfruta creando lo que nace de su imaginación, lo cual considera "pura esencia". A lo largo de sus 34 años de experiencia artística, se ha convertido en un artista reconocido en Oaxaca, obteniendo varios premios en diversos concursos.